Año Cinco

Vale. Si estais leyendo esto, es que es el día 27 y, oficialmente, este blog ha alcanzado los cinco años de existencia. Cinco años... ¿ya? Y, por otro lado... ¿tanto?

En fin, que cinco años en esto de la blogosfera no son cualquier cosa, así que hoy mismo a partir de las ocho de la mañana comienzan los fastos. ¿Y cómo van a ser? Bueno, no quería eternizar el tema durante una semana (y vive H'ronmeer que os lo habeis currado y habría material para ello), así que la cosa va a ser más bien del tipo RRRRRUUUUUMMMMBLE!!!! A lo largo de todo el día, sin mediar provocación previa siquiera, irá apareciendo todo lo que ha llegado, que es mucho. Dibujitos, sí. Y posts al más puro estilo BDJC. Con gorilas, gorilas nazis, chochoas y de todo. Y, ejem, algún que otro articulillo elogioso para con este que escribe. Y hasta un relato corto. O dos. Calidad y cantidad, amigos, como no podría ser de otra manera en este blog coral que ha reunido para la ocasión una conjunción de talentos jamás vista sobre la faz de la tierra excepto, quizás, en el Consejo de Ministros de Ciudad Gorila. Espero que esteis a la altura y no dejeis a nadie sin su correspondiente ración de comentarios. Tratadlos a ellos como me tratáis a mí, y... no, espera... bueno, es igual.

Y para los chicos del feisbuc y del tuiter, tan de moda en los últimos tiempos, tengo intención de ir colgando también a lo largo del día una especie de retrospectiva del BDJC, con aquellos posts a los que tengo especial cariño o que a mí mismo me hicieron especial gracia. Sí, ya sé, remember el Señor Lobo. Pero qué coño, un día es un día.

Así que vamos a ver si está todo preparado, que creo que sí: Oreos y leche calentita...



Check.

Unos sugus (¿qué clase de cumpleaños sería sin repartir sugus?)...



Check.

El mueble bar bien dispuesto...



Check.

Un equipo de profesionales (de segunda mano) dispuestos a maquetar, subir imágenes y postear sin descanso...


Check.

¡Ah, sí! ¡Y casinos!


¡Y, y, y...! Mmmm... creo que se me olvida algo... ¿qué podrá ser?

Oh, si.

Daros las gracias a todos, por lo majos que sois y por todo lo que me habeis hecho disfrutar y por todo lo que me habeis dado a lo largo de estos estupendos -al menos para mí- cinco años. Recibid por tanto un enorme abrazo verde de este que lo es, un admirador, un amigo, un esclavo, un siervo...

Jotace.