Ocurre con demasiada asiduidad.
Un guionista se queda sin ideas. O, al revés, tiene una idea que tiene que encajar como sea. Da igual la causa; pero el resultado es que uno de esos personajes a los que tanto admiramos, con los que tanto disfrutamos, comienza a comportarse de una manera que nosotros sabemos que no es la correcta. Porque le conocemos. Oh, sí, le conocemos bien, y ese personaje jamás haría eso. O no de esa manera.
Y eso nos disgusta y nos molesta.
En ocasiones, para añadir todavía más ofensa, ni siquiera es un guionista de comics el involucrado. Es un publicista. Que arranca a nuestros queridos personajes del medio que les vio nacer, y los, ustedes perdonen, prostituye. Los pone al servicio de una causa que jamás defenderían, o, aún peor, los convierte en meras mascotas comerciales de la peor ralea. Viola su esencia.
Como es el caso de la Agenda FNAC para 2008, que utiliza a nuestros queridos Batman y Robin de la antedicha manera. Helos:
Pero por favor, señores de la FNAC.... ¿cómo van a ser esos nuestros Batman y Robin? ¿Acaso no se dan cuenta, de que, entre las piernas de Batman... se percibe claramente la presencia de un sillín?
Hombrepordios...
Un guionista se queda sin ideas. O, al revés, tiene una idea que tiene que encajar como sea. Da igual la causa; pero el resultado es que uno de esos personajes a los que tanto admiramos, con los que tanto disfrutamos, comienza a comportarse de una manera que nosotros sabemos que no es la correcta. Porque le conocemos. Oh, sí, le conocemos bien, y ese personaje jamás haría eso. O no de esa manera.
Y eso nos disgusta y nos molesta.
En ocasiones, para añadir todavía más ofensa, ni siquiera es un guionista de comics el involucrado. Es un publicista. Que arranca a nuestros queridos personajes del medio que les vio nacer, y los, ustedes perdonen, prostituye. Los pone al servicio de una causa que jamás defenderían, o, aún peor, los convierte en meras mascotas comerciales de la peor ralea. Viola su esencia.
Como es el caso de la Agenda FNAC para 2008, que utiliza a nuestros queridos Batman y Robin de la antedicha manera. Helos:
Pero por favor, señores de la FNAC.... ¿cómo van a ser esos nuestros Batman y Robin? ¿Acaso no se dan cuenta, de que, entre las piernas de Batman... se percibe claramente la presencia de un sillín?
Hombrepordios...
[Shimart y Sota de Picas fueron los primeros, que no los únicos]
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