Yo, antes, empezar un nuevo curso como el que empezamos hoy lo llevaba fatal. Y eso que uno ya lleva currículum en esto, eh, quince años de enseñanza ahí, avalándome... pero no importa, porque la noche anterior no dormía jamás. Venga a dar vueltas, sudando, que si a ver cómo serán los chavales, cómo les entro el primer día, que no se me olvide explicarles lo de... en fin, un sinvivir.
Hasta que descubrí, experimentando como los buenos, las innegables virtudes didácticas de combinar plátanos y electroshocks, claro.
Hasta que descubrí, experimentando como los buenos, las innegables virtudes didácticas de combinar plátanos y electroshocks, claro.
Lo único es que parece que las descargas aumentan la pilosidad del alumnado, pero, eh, no se puede tener todo.