Es mucha la presión

Hacedme caso: si aspirais, como yo, a conquistar el mundo,es absolutamente imprescindible contar con elpersonal adecuado. Porque cuando lleguen los malos momentos, que llegarán, tienes que tener personal cualificado en el que confiar. 

Pero tampoco basta con que estén cualificados. Es necesario que posean también cierto grado de empatía para con sus superiores. No demasiada, pero sí la justa para asegurar su presencia en esos momentos difíciles. Que les permita, llegado el momento, dejar a un lado el hacha de la guerra y ser capaces de ofrecer, por qué no, un poco de ternura. Unos brazos que te cobijen. Unas amorosas manos que te acomoden.

Porque conquistar mundos no es un trabajo para débiles. Al contrario, es un trabajo de mucha presión. Y esa presión se acumula, se acumula... y tarde o temprano va a salir. Y, cuando salga...

...bueno, cuando salga, alguien va a tener que comérsela...

Es por esto que ahora tienen un sindicato

Ahora ya no se lleva... pero, en los buenos viejos tiempos, la costumbre era que los villanos llevasen a sus adláteres, acólitos o secuaces de riguroso y distintivo uniforme. No sé si el Joker llegó a llevar payasos, pero me consta que, por ejemplo, Cheetah llevaba a sus gorilas con uniforme... pues eso, de gorilas. Tenía una imagen donde decía algo así como "el plan es éste: robamos el banco, y luego desaparecemos entre la multitud...", pero se la tragó el anterior disco duro. Otra vez será.

En cualquier caso, el otro día me sorprendió descubrir que el Espantapájaros también compartió esta inveterada costumbre, y en cierta ocasión (Batman #261) dio en ejecutar sus criminales actos con la ayuda de dos sicarios dos, con su correspondiente uniforme y nombre en clave. ¿Me atreveré a decirlo? Claro que sí, que co*o. Señoras, señores, tengo el gusto de presentarles a los Strawmen: los Hombres de Paja, familiarmente conocidos como los "hombres paja" o "los pajas":

Las pajas, buscando el ojo ajeno.
El de Batman, en concreto.

Como ven, son dos. Para distinguirlos, al más bien fornido podríamos llamarlo, bueh, yo qué se... Pajote. Y al más escuchimizado.. mmmm...¿Pajilla? Bueno, pues ya está. Pajilla y Pajote, quede para la posteridad el dato, fueron los Hombres-Paja del Espantapájaros.

Y, por favor, no se dejen engañar por lo festivo del disfraz: ser un Hombre Paja no era fácil.

"¡Whew! ¡Me alegro de que haya terminado!"
"No... es sólo el comienzo!"

Que se lo pregunten a Pajote.

Weaponeros de Qward, tramperos de Connecticut

Weaponeros de Qward.

Soldados de élite.

Expertos en combate a distancia y cuerpo a cuerpo.

Entrenados para la supervivencia en toda circunstancia y situación imaginables.

Y, además de todo eso...

¡BLEPBLEPBLEPBLEPBLEP!

...unos jachondos de cuidado.