Ya pasa... un día te levantas, te miras al espejo, y piensas... ¿quien coño es ese tío?
Y es que, amigo, los años pasan volando... setenta años, que se dice pronto. Porque serás ultra poderoso y todo lo que quieras, pero... el tiempo, cómo va pasando el tío... que no respeta nada, oyes.
Yo, querido Supes, te recomiendo que te tomes las cosas con un poquito más de calma. Yo que sé, abrígate un poco más en invierno...
...cuidate un poquito más la salud. La dentadura, por ejemplo...
...y hazte chequeos a menudo.
Porque, te lo digo en serio, para la edad que tienes, hay que reconocer que tan mal no estás. Que no, en serio.
Pero, aún así, intenta no hacer demasiados esfuerzos...
...aprovecha los parquecitos que Metrópolis puede ofrecerte (qué bueno, el solecito)...
...pero, sobre todo, no te quedes en casa agobiándote.
Intenta mantener el contacto con los colegas, que eso siempre anima.
Y, por supuesto, la familia. ¿Donde vas a estar mejor que con los tuyos?
En fin, campeón, que yo te veo estupendo, hombre, que me alegro un montón de verte en tan buena forma...
...y, sobre todo, no te deprimas: estoy convencido...
...de que tú nos enterrarás a todos.
Feliz cumpleaños, chavalote.
