Feliz, feliz en... ¿nuestro día?

Estoy de Booster Gold hasta las narices... ¿pues no va el tío y se las arregla para tener el mismo cumpleaños que yo?

Es que los hay que no saben qué hacer para llamar la atención, ospatú... en fin, que de cualquier manera, levanto públicamente por cuarta vez ya mi vaso de leche y mis oreos, y brindo por ustedes en el día de mi nuestro cumpleaños:

¿Cómo? ¿qué? Ah... este... treinta y nueve. Treinta y nueve. ¿Viejo yo? ¡Sal a la calle y dímelo a la cara si tienes huevos!