Amigos, quiero haceros una confusión. Una confesión, perdón. Yo... yo no he sido siempre el titán DCero que todos teméis y admiráis... yo... una vez fui... ¡choke!, una vez fui un Spider-Fan.
En aquel tiempo, lo más que se podía encontrar de DC eran los Supermanes de Novaro. Donde Superman jalaba el carro de los pillos, ayudado por Bruno Díaz u Oliverio Reina. Que estaba bien, eso ya podía verlo sin problemas... pero... siempre hay un pero. Varios peros, de hecho.
Los peros se llamaban Gwen Stacy, Jonah Jameson, Harry y MJ. Y Duende Verde, Buitre, Misterio y Doctor Octopus.
Y el peor de todos... se llamaba John Romita. John Romita padre.
Y yo caí
a cuatro pa rendido ante la evidencia. Aquello
molaba.
Por supuesto, en unos cuantos años, todo se fue a la mi*rda. Muuuuucho antes de que a Peter le salieran clones como pulgas, mucho antes de que Veneno y Venganza y... en fin, mucho antes de los noventa, yo ya estaba en la verdadera senda de la iluminación comiquera.
Pero, sabéis, siempre queda aquel rinconcito que le guardas a tu héroe de la infancia. Así que, amigos, en un acto de justicia, declaro ésta la Spider-Semana en el Blog de Jotace. Con banner y todo.

Ya, ya sé lo que estáis pensando, amigos marvelitas. Pero nada debéis temer de este spider-fan. Seré delicado y respetuoso con el mito. De verdad. Palabra de boy-scout.
Seré bueno.
Seguro.
En serio.

Oh, diablos, ¿a quién quiero engañar?
PD: Me ca*o en los lunes