Y, por supuesto, no podía ser otro que la Maravilla Empijamada de Metrópolis, el Supes. ¡Aguanta ahí, campeón, que estamos contigo! ¡Si quieres, puedes! ¡Ahí arriba! ¡Ahí arriba con fuerza! ¡Te apoyamos!
A ver lo que dura... con el currículum que gasta el tipo, le doy una semana máximo... ¡Eeeeeeeh, chavalote! ¡Estamos contigo, Supes! ¡Eres lo más!