Quede para la posteridad: desde ayer, la marcianita ya no duerme en cunita, sino en su cama. Pros: eeeemmm... alguno habrá. Contras: que a las siete de la mañana en domingo, no hay nada que le impida bajarse de la cama, venir a la habitación y exigir a voces su almuerzo.
Señor, dame fuerzas.
Ah, sí, el jeroglífico y eso.
Señor, dame fuerzas.
Ah, sí, el jeroglífico y eso.
Hala, venga.
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Humor comiquero sofisticado e inteligente. Hacemos de la elegancia nuestra bandera. No encontrará usted nada mejor a este lado del rio ese de CHOCHOA.