Vosotros, jovenzuelos, probablemente no lo creáis... pero no hace mucho, cada españolito (de sexo masculino por supuesto) llevaba dentro un soldadito. Y, durante un período de tiempo que osciló entre los dos años y los nueve meses, miles de jovencitos se vieron en la tesitura de servir a la patria en lo que se llamaba "servicio militar", de la cual se salía hecho un hombre (más por supuesto todavía).
Y, para que sepáis lo que era, qué mejor que el recluta Superman nos ilustre. Veréis, la mili era un sitio donde un tipo con un pito en la boca te ordenaba gilipolleces...
Y, para que sepáis lo que era, qué mejor que el recluta Superman nos ilustre. Veréis, la mili era un sitio donde un tipo con un pito en la boca te ordenaba gilipolleces...
...y, si demostrabas ser capaz de cumplir órdenes estúpidas de la manera más cretina posible...
...recibías lo que se llamaba "un ascenso".
Para más información, os remito a las Historias de la Puta Mili del inconmensurable Ivá...
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