Ocho razones por las que el One More Day no es una mierda

Este mes se publica en nuestro país, se ha publicado ya, One More Day. La saga que cambiará los mitos arácnidos para siempre.

Sí, oooooootra vez.

Y, como siempre, el coro de plañideras ya ha empezado a lloriquear. "Es innecesario", "se carga años de continuidad", "me c*** en la P*** madre de Q"... Amortiguado por la distancia con la edición original USA si se quiere, pero más o menos ese es el percal.

El Blog de Jotace, sección Investigaciones de Campo Comprometidas, se ha hecho con un ejemplar original del primer número de la saga -al módico precio de un euro-, con la finalidad de sacarle todo el partido posible. Y vaya si se lo he sacado.

¿Que cómo tiene los huevos Quesada? Así.

Observen el resultado de mis desvelos, observen:

Adminículo antideslizante: 8/10. Un exceso de satinado le impidió alcanzar el excelente.


Protector para sofás: 10/10. La marciana dice que no le miréis los pies, por favor.


Equilibrador de patas de mesa: 10/10. Aunque mi mesa no cojea, no como la de otros.


Agenda telefónica de urgencia: 9/10. De nuevo el satinado, cachis.


Mantel individual: 9/10. Algo pequeño. El tamaño absolute es quizás el ideal.


Florero autoportante: 10/10, aunque solamente se testaron flores de plástico.


Alfombrilla de ratón: 10/10, para ratón óptico.


Kit de expresión plástica para niños: 10/10. Mi trabajo me costó arrebatárselo a la marcianita.



No sé vosotros, pero yo, desde luego, estoy contentísimo con mi compra. Es que ni en los chinos le saco tanto partido a un euro... perdón, ¿qué? ¿Que es un tebeo? ¿Que había que leérselo?

Sí hombre, ¿y qué más?

[El BDJC garantiza que ningún tebeo
fue dañado o mutilado
durante la realización de este post.
Pero de todos modos, no lo intenten en casa.]