La terrible maquinaria descontextualizadora, ese monstruo que hemos creado un poquito entre todos (no escurráis el bulto ahora), se ha cebado especialmente con la Silver Age de DC. Pero también con la Golden Age. Y con la DC actual. Y con Marvel, claro. Y con los clásicos americanos: Rip Kirby y el Príncipe Valiente han sufrido también la furia descontextualizadora que nos invade. Incluso el aparentemente inocuo Mortadelo, en fechas recientes. Parece que nada puede escapar a la descontextualización.
¿Nada?
Bueno, lo cierto es que había una obra que, hasta el momento, había conseguido mantener su dignidad intacta. Una Obra Maestra. Un totem. La piedra de toque del comic mundial. El clásico entre los clásicos. La creme de la creme. Lo muy muy y lo más más, y lo tope de lo tope.
Pero amigos...
Nada es sagrado.
[Y Alberto Moreno lo sabe...]
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